La extensión de la vigencia de los carnés expedidos a extranjeros que se acogieron al Plan Nacional de Regularización y que permitirá completar las documentaciones a quienes habían iniciado el proceso, evidencian la necesidad de que el Estado defina la política migratoria del país.
Sectores políticos y sociales se manifestaron ayer a favor de que las autoridades no se limiten a actuar por coyunturas o presiones del momento.